Durante años, la prensa local de Castellón, incluyendo periódicos como el Mediterráneo o el Heraldo de Castellón, fue víctima de una elaborada y peculiar broma. Un grupo de bromistas se dedicó a enviar fotografías falsas a estos medios para que fueran publicadas en la popular sección de “Gente”. Las imágenes, supuestamente vinculadas a felicitaciones de cumpleaños, eventos sociales, aniversarios y otras efemérides, resultaron ser completamente falsas.
La historia se mantuvo oculta hasta que en 2012, Toni Betrán, exdirector del programa “Gormandia” de Canal 9 Televisión, la sacó a la luz a través de una publicación en su perfil de Facebook. Betrán reveló que no solo las personas en las fotos no existían, sino que muchas eran figuras mundialmente conocidas. Entre los protagonistas de esta broma se encontraban personalidades como la escritora Gabriela Mistral, el diseñador Philippe Starck, el dictador Nicolás Ceaușescu y el mismísimo Bill Gates en su juventud. Para evitar ser detectados, los bromistas incluso modificaban levemente los nombres de estos personajes.
A pesar de lo evidente que resultaban las imágenes y los falsos nombres, estas publicaciones terminaron en varias ediciones de los periódicos de Castellón, pasando inadvertidas para los editores y, por supuesto, para los lectores. Lo más sorprendente es que durante años nadie detectó la broma, que involucró decenas de fotografías de personalidades históricas, artistas, e incluso figuras controvertidas como Adolf Hitler.
En 2012, tras la revelación de Toni Betrán, un lector atento decidió recopilar todas estas publicaciones en una página web titulada “Alabanza a la prensa local de Castellón”. Esta web se ha convertido en un documento imprescindible para los curiosos y los aficionados a las historias más inusuales de la prensa. A través de esta página, se puede observar cómo las publicaciones más serias de la prensa local fueron burladas, mostrando imágenes de figuras tan variopintas como estrellas del erotismo de los años 80 y hasta algunos premios Nobel.
El redescubrimiento de esta hilarante historia no solo genera carcajadas, sino que también plantea preguntas sobre el rigor y la verificación en el periodismo. La web, que documenta de manera exhaustiva la magnitud de la broma, se ha convertido en un fenómeno viral en la provincia y más allá, demostrando cómo, incluso en la era de la información, los medios pueden ser fácilmente engañados.
Una historia que pasó inadvertida durante años y que, desde su redescubrimiento en 2012, sigue causando asombro y risas entre quienes se adentran en esta crónica de la prensa local más absurda.
Pues la del Chapo Guzmán también fue muy buena 🤣, pero fue muy posterior a ese documento, un chute por los viejos tiempos.